jueves, 2 de agosto de 2012

PASOS DE LIBERACIÓN


PASOS DE LIBERACIÓN

1. Honradez

   Se ha debe ser honesto, honrado e íntegro con uno mismo y con Dios sobre todo si se espera recibir la bendición de Dios de la liberación. (NO diremos que es la liberación, sino, los pasos de la misma). La falta de honestidad mantiene áreas de la vida en tinieblas. Los espíritus demoníacos progresan en tales tinieblas, pero la honradez ayuda a sacarlos a la luz. Todo pecado que no se confiese o del cual no haya habido arrepentimiento, otorga al demonio un "derecho legal" para quedarse. (No hablamos de auto liberación, sino de la ministración del afectado).
‒Pídale a Dios que le ayude a verse a sí mismo como él lo ve y a traer a la luz cualquier cosa que no sea del Señor, para poder confesarlas y empezar a rechazar la ley del pecado y el derecho legal y mentiroso del diablo.

«"Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; y tú perdonaste la maldad de mi pecado"» (SAL. 32:5). «"Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis pensamientos; y ve si hay en mí camino de perversidad, y guíame en el camino eterno"» (SAL. 139:23-24).

2. Humildad
   Esto implica reconocer que uno debe depender de Dios y de su provisión para la liberación. «" ... Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes. Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros"» (STGO. 4:6-7). Esto también implica una apertura completa con los siervos de Dios que ministran la liberación.
«"Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros para que seáis sanados..."» (STGO. 5: l6 ss.).

3. Arrepentimiento

   El arrepentimiento es un regreso decidido a apartarse del pecado y de Satanás. Es indispensable aborrecer todo mal de la vida y dejar de estar de acuerdo con el mal.
« ¿Andarán dos juntos, si no estuvieren de acuerdo?» (AM. 3:3).
«»Se ha de aborrecer el pecado de corazón. «"Y allí os acordaréis de vuestros caminos, y de todos vuestros hechos en que os contaminasteis; y os aborreceréis a vosotros mismos a causa de todos vuestros pecados que cometisteis"» (EZQ. 20:43).

La liberación no se debe ministrar simplemente para aliviar de los problemas del afectado-a, sino más bien, para tomar como ejemplo a Jesús, por medio de la obediencia al padre en todo y por todo tratar de desarraigar las raíces de amargura de la persona y así desacreditar al diablo dejando claro lo que Dios requiere ante el problema obediencia total para poder ser liberado-a.
‒Arrepentimiento, una obedecido lo que Dios demanda, se trata de dejar todo aquello que estorbe el crecimiento espiritual, el ministerio y el compañerismo. El arrepentimiento necesita una confesión previa, total y sincera de todos los pecados (inclusive los ocultos). Esto quita cualquier derecho a los espíritus demoníacos de operar libremente a sus anchas.

4. Renunciación
   Aclaremos la diferencia entre, renuncia y la acción y efecto de dicha palabra: La renunciación es dejar el mal. La renunciación es la acción que resulta del arrepentimiento. (Por ello se ha de se sincero en la renuncia).
«"Al ver él (Juan el Bautista) que muchos de los fariseos y de los saduceos venían a su bautismo, les decía: ¡Generación de víboras! ¿Quién os enseñó a huir de la ira venidera? Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento"» (MT. 3:7-8).
‒Hacer frutos de arrepentimiento implica más que palabras, (se ha de desarrollar dicho arrepentimiento ante el pecado dejado atrás por la renuncia del mismo). Además es una demostración del arrepentimiento que se llevó a cabo, y es la prueba que ya se dejaron esos pecados.

‒Por ejemplo, si alguien se arrepiente de la lujuria y de la concupiscencia (deseos desordenados de la carne), es necesario que destruya todo material lascivo que le recuerde tal pecado.
‒Si alguien se ha arrepentido de un error religioso es necesario que renuncie completa y totalmente destruyendo toda la literatura y todas las cosas asociadas con tal error religioso.
5. Perdón
   Dios perdona libremente a todos los que confiesan sus pecados y piden perdón por medio de su Hijo (ver 1 JN. 1:9). «"Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad"». Él espera que perdonemos a quienes nos haya herido en cualquier forma.

«"Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre Celestial; mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco Padre os perdonará vuestras ofensas"» (MT. 6:14-15).

‒La voluntad de perdonar es absolutamente esencial para la liberación (ver MT. 18:21-35). Ningún ministro que haga liberación puede efectuarla a menos que el candidato a ser liberado haya cumplido las condiciones de Dios.
6. Oración

Pídale a Dios que le libere y que lo mantenga libre en el nombre de Jesús.
«"Y todo aquel que invocare el nombre de Jehová será salvo... (Y todo aquel que invocare el nombre del Señor será liberado)"» (JOEL. 2:32 ss.).
7. Guerra
   La oración y la batalla son dos actividades separadas y distintas. La oración es hacia Dios y la guerra es hacia el enemigo en esos dos flancos… se desarrolla. Nuestra batalla contra las potestades demoníacas no es carnal, sino espiritual ver Efesios 6:12; «Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes».
«Pues aunque andamos en la carne, no militamos según la carne;  porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo». 2 CO.10:3-5.

‒Es indispensable usar como armas el sometimiento a Dios, la sangre del Señor Jesús, la palabra de Dios, y el propio testimonio como creyente ante el antagonismo del diablo (véase Santiago 4:7; «Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros».
Apocalipsis 12:11; «ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte».

EF. 6:17). «Tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios».

‒Identifique los espíritus, diríjase a ellos directamente por su nombre, y con voz de mando y en fe, ordéneles salir en el nombre de Jesús, (NO hace falta gritar, sino hacerlo con poder y fe). Entre en batalla con decisión y seguridad de victoria. Cristo no puede fallar, (nosotros si, al hacerlo por nuestra cuenta). Él es el libertador háganoslo como es debido.

«"Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios...»" (MR. 16: 17 ss.).

«"He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones. y sobre toda fuerza del enemigo, y nada os dañará (LC. 10:19).

"¿Andarán dos juntos, si no estuvieren de acuerdo?. . ."

ATT. Pastor Mariano.




lunes, 7 de mayo de 2012

Introducción:

La intercesión es algo que cada cristiano debe entender para vivir una vida victoriosa, y también para que el ministerio sea fructífero y dirigido por el poder del Espíritu Santo. Con frecuencia usamos la palabra <> como sinónimo de <>. En una conversación común es aceptable pero no cuando I usamos en una forma técnica. La intercesión es venir a Dios a fin de conversa. 

INTRODUCCIÓN A LA INTERCESIÓN.

La respuesta es sencilla. Él había aprendido a orar, cuando Moisés oraba en el monte, Josué se pasaba la noche al pie del mismo monte en oración. Es por eso que cuando le llegó el Momento a Moisés de partir con el Señor. Dios tenía un líder que conocía el valor de la oración. Nosotros conocemos la historia de David, el profeta Elías y otros que pasaban horas en oración. Pero nadie ha manifestado el poder de Dios como Jesucristo, su hijo. Él dedicó periodos largos en oración en la presencia del Padre, Jesús no hacia nada sin antes que se lo fuera revelado. Ese fue el origen de su poder.

Se cuanta la historia de Charles Finney cuando pasaba por una pequeño pueblo en tren. El Espíritu Santo descendió sobre los pecadores. Los hombres que se encontraban en los bares cayeron de rodillas convencidos de pecado y pidieron a Jesucristo que los salvara. Esto sucedió en Houston, New York. Ese poder radicaba en las largas oras que pasaba en oración. Hay tantos otros siervos que Dios ha usado poderosamente y el caso ha sido el mismo “el poder de la oración de intercesión”.
Intercesión: Se deriva del latín “inter” que significa <> y “cederé” significa <>. La intercesión implica entremeterse o ponerse en la brecha.

EZEQUIEL 22:30:

Y busqué entre ellos hombre que hiciese vallado y que se pusiese en la brecha delante de mí, a favor de la tierra, para que yo no la destruyese; y no lo hallé.

Los tiempos en la época del pueblo de Israel eran tan malos que Satanás había desviado a los príncipes y sacerdotes de los principios establecidos por Dios. En el versículo que hemos leído se refiere a las ruinas físicas y espirituales de Jerusalén, el pecado abre brechas en los muros espirituales, Dios busca un hombre para que se ponga en la brecha, esta es una metáfora que alude a la acción intercesora del necesitado. Hay una brecha entre Dios y el hombre, que un intercesor puede reparar. La intercesión es guerra espiritual, el pasaje indica claramente la obra intercesora. La frase “delante de mi” “a favor de”. El intercesor viene ante Dios a favor de otros. También significa que el intercesor tiene una doble responsabilidad. No solo hace vallado (muros), lo cual sugiere que no solamente restaura la brecha causada por el enemigo, sino que se pone en la brecha, para detener su avance.

Los intercesores vinculan la misericordia de Dios con la necesidad humana, La oración. En los días de Ezequiel, Judá era lo único que quedaba de la viña del Señor, el reino de Israel había sido destruido y su pueblo enviado al exilio bajo Sargón I, el gobernante Asirio, en el año 722 a C.

Después de 150 años el pecado había abierto una horrenda brecha en la muralla protectora de Judá, y para que no entraran intrusos, alguien debía ponerse en la brecha hasta que se reparara. Dios usa este pasaje para describir la búsqueda divina de un intercesor entre los sacerdotes, profetas, príncipes, o el pueblo; alguien que se parara en la grieta y sirviere de vínculo entre la misericordia de Dios y la necesidad de las personas.

En nuestros días el vallado protector de nuestras familias, las iglesias y las naciones, están en una desastrosa condición. Dios está buscando intercesores que se pongan en la brecha y permanezcan allí vigilando hasta que sea reparada. Los intercesores necesitan establecer una relación intima con Dios.

¿Puede la petición de un creyente determinar las acciones de un Dios todopoderoso?

Veamos una poderosa analogía en el libro de Ester en función de un intercesor. Asuero era el poderoso rey de Persia, que dominaba todo el medio oriente desde la India hasta Etiopia aproximadamente unos 400 anos a.C. Este rey se enamoro de Ester sin saber que era judía y la hizo su reina, mientras tanto Aman, capitán de los príncipes se molesto porque Mardoqueo no se inclino ante el, al darse cuenta que era Judío, planeo exterminarlos a todos incluyendo a los niños Ester 3:13.

En la época del rey Asuero se tenia la costumbre, que ninguna persona, ni siquiera la reina, podía iniciar una audiencia con el rey, nadie; solo aquella persona a la que el se refería podía hablarle. La pena por violar esta costumbre era la pena de muerte. Ester arriesgó su vida y le contó al rey, las malas intenciones de Aman, a lo que el rey respondió a favor de Ester, ejecutando a Aman y entonces ajusto las leyes de los Medos y los Persa para salvar al pueblo Judío.

¿Analogía de la intercesión?

1. . Asuero, políticamente hablando, era omnipotente en su reino. En eso representa a Dios.
2. . Aman representa a Satanás quien viene a matar, hurtar y destruir.
3. . Ester es la intercesora, la que <>.
4. . Mardoqueo representa la función del Espíritu Santo al comunicar la voluntad de Dios a Ester a cerca de las malas intenciones de Satanás.

Podemos ver que la intercesión del creyente puede hacer que los planes de Satanás sean frustrados y destruidos, la oración intercesora es poderosa haciendo que Dios interrumpa toda artimaña del diablo.
Muchos escritores citan las palabras de Juan Wesley cuando dijo: “Dios no hará nada sobre la tierra excepto en respuesta a la oración del creyente”.

Juan Calvino afirma en sus institutos que “las palabras no logran explicar cuan necesaria es la oración”. Dice que la providencia divina no excluye el ejercicio de la fe humana. A pesar de que el guarda de Israel no descansa, Calvino

Dice que <>.
Que dicen los líderes contemporáneos como Jack Jayford; Usted y Yo podemos ayudar a decidir cual de estas dos cosas habrán de venir sobre la tierra: La bendición o la maldición. Nosotros determinamos si se libera la bondad de Dios hacia situaciones específicas, o si se permite el pecado y Satanás. El factor determinante es la oración.

Grandes intercesores del Antiguo Testamento. (Moisés y Samuel).

Jeremías 15:1


Me dijo Jehová: Si Moisés y Samuel se pusieran delante de mí, no estaría mi voluntad con este mi pueblo...
Los intercesores conocen el sistema organizado de Satanás y saben que hay una guerra espiritual entre sus demonios y el pueblo de Dios. Esta guerra no puede ser ganada, sino a través de las armas espirituales que se nos han delegado para luchar en contra del pecado y de Satanás.

Éxodo 17:8 Leemos un tremendo relato acerca de la batalla de Refidin, en la cual Josué derrotó a Amalec. Josué quedó permanentemente en los archivos de la historia militar como el general que ganó aquella victoria.

Guerra espiritual a nivel estratégico

Éxodo 17: 8-13

Antes de ir a una guerra se determina la estrategia que se va a seguir para obtener la victoria, y esto es precisamente lo que se hizo, Moisés determinó que Josué dirigiera la guerra contra Amalec, mientras que él (Moisés) subiría a la montaña para interceder a favor de Josué y su ejército.

Éxodo 17: 10-11 Observe lo que sucede: Moisés está intercediendo, tiene las manos levantadas hacia el cielo clamando por la victoria en contra del enemigo, Josué está ganando la batalla, pero de pronto Moisés baja las manos porque está cansado, al hacerlo la Biblia dice que Josué comenzó a perder la guerra, todos conocían el plan estratégico que estaban siguiendo y vieron que cuando dejaba de interceder, Josué perdía terreno, perdía la batalla; Moisés había llevado con él a Aarón y a Hur, estos dos hermanos en la fe, hicieron enorme trabajo logrando que Moisés no desmayara en su trabajo intercesor, sosteniendo los brazos de Moisés hasta la puesta del sol. (Fueron horas de guerra espiritual en oración) logrando así una gran victoria en el mundo físico como también en el mundo espiritual.

La batalla se ganó mediante la oración intercesora y no mediante la oración del ministerio. Hoy conocemos a muchos ministros que como Josué son vencedores, pero que hay en su ministerio, nada menos que un poderoso grupo de intercesores que se han metido a la brecha, para detener los ataques de Satanás y no cesan de orar hasta que ven la victoria en sus manos. Cual es el resultado: congregaciones grandes y líderes llenos del Espíritu de Dios.

Éxodo 32:10-14

Ahora, pues, déjame que se encienda mi ira en ellos, y los consuma; y de ti Yo haré una nación grande. Entonces Moisés oró en presencia de Jehová su Dios, y dijo: Oh, Jehová, ¿porque se encenderá tu furor contra tu pueblo que tu sacaste de la tierra de Egipto con gran poder y con mano fuerte? ............ V/14 Entonces Jehová se arrepintió del mal que dijo que había de hacer a su pueblo.

Moisés; un día le dijo al Señor: Que perdones ahora su pecado, y si no, ráeme ahora de tu libro que has escrito. Que hermoso fuera si nosotros nos paráramos en la brecha como lo hizo Moisés por el pueblo de Dios. Sucedió cuando subió al Monte Sinaí para recibir las tablas de la ley, y cuando bajo el pueblo se había hecho el becerro de oro.
Intercesión Por Israel.
1 SAMUEL 7: 8-9:

Cuando supieron los Filisteos que los hijos de Israel estaban reunidos en Mizpa, subieron los príncipes de los Filisteos contra Israel; y al oír esto los hijos de Israel, tuvieron temor de los filisteos. Entonces dijeron los hijos de Israel a Samuel: No ceses de clamar por nosotros a Jehová nuestro Dios, para que nos guarde de las manos de los Filisteos....Y clamó Samuel a Jehová por Israel, y Jehová le oyó.

A causa de la oración intercesora de Samuel; Dios hizo temblar a los Filisteos con truenos haciendo que su pueblo prevaleciera en la batalla.

1 SAMUEL 12:23

Así que, lejos esté de mí que peque contra Jehová cesando de rogar por vosotros... Debemos agradecer a Dios que esto no sea simplemente historia bíblica, sino que hoy día; Dios ha levantado líderes intercesores y los está levantando para lograr su propósito en esta tierra. Su propósito es que las iglesias crezcan, se multipliquen en todo, y esto solo puede ser posible si, nosotros como hijos de Dios tomamos el lugar que nos corresponde para glorificar el nombre de Jesús por el poder del Espíritu Santo en nosotros.


ATT. Pastor Mariano




sábado, 5 de mayo de 2012

DEMONIZACIÓN DEL CREYENTE II

DEFENSA CONTRA LA DEMONIZACIÓN.







Cuando los japoneses estaban por atacar Pearl Harbor había poca vigilancia y atención. Era un lindo domingo, y todo aparentaba calma.


‒ La guerra en el Pacífico parecía algo muy lejano e irreal. Hubo algunos informes aislados de que veían un avión extraño; pero los responsables parece que no le dieron importancia; tampoco lo hicieron los que estaban de guardia. Nadie se percató de la cercanía de los japoneses. El ataque inmediato no era amenaza.


‒ ¡El enemigo atacó! Las bombas cayeron con devastadora exactitud y poder sobre la armada estadounidense. Hombres y barcos anclados supuestamente en un lugar seguro de repente se vieron derrotados trágica y ampliamente. No tuvieron tiempo de responder al fuego. No hubo defensa ni contraataque que funcionara. Fueron sorprendidos desprevenidos, durmiendo, pese a que algunos informes de inteligencia advirtieron el posible movimiento japonés. Mientras el enemigo hizo creer a los líderes estadounidenses que todo estaba bien y que no había por qué preocuparse, comenzaba el ataque por sorpresa. Como cristianos, debemos estar prevenidos. Tenemos la revelación de que estamos en una guerra espiritual. No podemos ser sorprendidos durmiendo como ocurre con tantos. El enemigo tiene sus estrategias bien montadas, sus recursos son poderosos y posee gran experiencia en la batalla. Satanás anda rugiendo a nuestro alrededor buscando a quien poder devorar. Nosotros tenemos que resistir bien firmes en la fe (l P 5.8-9). Ignorarlo no lo hará desistir. P. Wagner.






Si pretendemos triunfar, nos vemos obligamos tener una representación real de la batalla y enfrentarla apropiadamente, sobre todo en el área de la demonización de los creyentes. Se ha de tratar en forma general la guerra espiritual. Ahora vamos a dirigir nuestra atención a cómo combatir la demonización de los creyentes. Como venimos diciendo… la demonización de los creyentes es obvia.






REPRESENTACIÓN ADECUADA DE ENFRENTARNOS A LA BATALLA.






Una forma ordenada de enfrentarnos a la batalla espiritual esto requiere, en primer lugar, reconocer que es una realidad…. Segundo lugar, confiar en nuestra situación en Cristo; y tercer lugar, ser bíblicos y versados en nuestra conducta.





MOSTRARSE DE ACUERDO A QUE ES UNA REALIDAD.






Ignorar la demonización. Constantemente los cristianos que están mezclados en la labor en de la guerra espiritual, no son consecuentes de su auténtica naturaleza. Alternan la posibilidad de ignorarla o sacarla de sus mentes, pero vuelve una vez tras otra. Muchos viven derrotados o angustiados sin considerar nunca seriamente que pueden ser víctimas de oposición demoníaca. Y lo trágico es que sus guías espirituales, pastores y consejeros, tampoco lo sospechan. El enemigo está en su apogeo, haciendo una verdadera carnicería en el rebaño de Dios; mientras tanto, los pastores duermen o no reconocen la cercanía del lobo. Con frecuencia llaman a los veterinarios en vez de usar los poderosos recursos que tienen en sus manos, como la Palabra de Dios y la autoridad que les concede Cristo.






‒Es cierto que no pueden atribuírseles a los demonios todos los pecados, problemas o incapacidades. No podemos culpar al diablo de la lujuria de la carne o de todos los aspectos que nos tratan de arrastrar al mundo. Pero cuando tenemos que luchar con las causas naturales de las dificultades y no vemos alivio, tenemos que sospechar que es posible que la raíz de los problemas sean Satanás y los demonios. Con demasiada frecuencia se acusa a los amados hijos de Dios de falta de sinceridad o simplemente de no confiar en Cristo; de tener escondidas profundas rebeliones o de no dar lugar a Cristo como Señor de sus vidas. Se les dice que no tienen fe suficiente y esto hace que sean presa de profundas depresiones y desesperación. Nunca se ha considerado seriamente la posibilidad de una demonización.





La realidad de la demonización. Vimos la vasta evidencia escritural de tal realidad. También encontramos que la evidencia de la Escritura y de la teología no niega la posibilidad de que los cristianos sean víctimas de demonización. Estudios de casos llevados a cabo por consejeros prestigiosos dan buena evidencia de esta realidad. No podemos seguir ignorando este conflicto potencial dentro de los creyentes… Unger señala la posibilidad de que los demonios trataran de invadir a los hombres al comienzo de la historia bíblica. Dice que las dificultades gramaticales del texto hebreo en Génesis 4.7 desaparecen si se quítala palabra (robes) traducida «agazapado», como un término prestado de la lengua acaclia, rabisum que quiere decir «demonio». La traducción, entonces, quedaría así: «y si no hicieres bien, el pecado es un demonio que está a la puerta; con todo esto, a ti será su deseo (del demonio); y tú te enseñorearás de él (del demonio)).

1) Es posible que un demonio entrara en Caín cuando éste se rebeló contra Dios y puso en su mente la idea de cometer homicidio contra su hermano tras el rechazo que Dios el de su ofrenda. Quizás por eso es que a Caín se le describe como «que era del maligno, y mató a su hermano» (l JN. 3:12).El Nuevo Testamento abunda en evidencia sobre la realidad de la demonización. No podemos desechar livianamente evidencia tan abrumadora presentada por el propio Jesús. W.M. Alexander despoja los registros bíblicos de lo sobrenatural y trata de explicar la demonización en términos de «locura natural» o «epiléptica». Y explica los casos actuales como hipnotismo o intoxicación por narcóticos.

2) Él ignora el testimonio de Jesús y de los apóstoles. No toma en cuenta la conducta sensata, el cambio de condición, el testimonio de las multitudes incluidos los opositores de Jesús que resultaron de la expulsión de los demonios. Por otro lado, no presenta hechos que respalden su hipótesis de que en estos casos hubo presencia de drogas y de hipnosis. Seguiremos analizando... el tema.

Pastor Mariano Vargas.


domingo, 20 de marzo de 2011

PASOS PARA UNA LIBERACIÓN EFICAZ

6ª LEC. PASOS PARA UNA LIBERACIÓN EFICAZ Siempre hay que tener en cuenta que, la persona que necesita liberación sobre todo es, que están sufriendo y necesitan a Cristo. INT. Por lo tanto, lo primero es que acepten a Cristo como su salvador y libertador. Es un error enseñarnos con la persona, o asustarla... ¡gritándole del demonio! Que la tiene sujeta. No administramos demonios, sino vidas valiosas para Cristo. La palabra de Dios nos asegura que el evangelio debe ser presentado a las personas; ellas son las que deben tomar las decisiones... no encuentro en la palabra casos en los que Dios haya tratado con personas sin que ellas participaran en la administración de liberación. Es necesario tener respeto, prudencia y pudor. Si las herimos... ellas cerrarán su corazón y se irán mal. Ministremos con amor, con respeto no ministremos con el afán de adquirir fama, sino de que Dios recupere un alma desdichada y condenada. Pasos para la administración. 1. PASO. "Asegurarse de que la persona está manifestada" Existen tres clases de manifestaciones diabólicas en las vidas de las personas. El análisis de cada uno de ellos nos ayudará a determinar el nivel de manifestación que tiene la persona que estamos ministrando. Oprimido Se dice que una persona está siendo oprimida por el demonio cuando recibe una fuerte presión externa del enemigo para abra la puerta de su corazón y le permita entrar. Aún el demonio no está dentro de ella, sino que la está oprimiendo desde el exterior para lograr facilitar su ingreso. Veamos un ejemplo: ¡Si el diablo oprime una vida con pensamientos de temor y ella permite que ese temor controle su vida, Satanás logró su objetivo! Podemos observar que la opresión trabaja por medio de las tentaciones y persecuciones. -En muchos casos el demonio utiliza ése tipo de opresiones para ejercer presión en los cristianos y de esa manera lograr que regresen a su antigua vida de pecado. Esa es la razón por la cual la Biblia nos dice en Santiago 4:7: "7 Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros." Atormentado Este es el paso siguiente a la opresión. En esta etapa la persona le ha abierto la puerta diablo y él, ha ingresado a esa vida. A partir de allí trabaja desde adentro. La persona atormentada no está necesariamente endemoniada. La manifestación demoníaca es parcial y no total. Solamente ha tomado alguna área de quien se encuentra bajo la influencia satánica. Poseído o atormentado La persona está poseída o endemoniada ha perdido el control total de su voluntad. Es aquella a quien el diablo dirige a su gusto. Pierde total conciencia de sí misma y no recupera, ni se da cuenta de nada de lo sucedido. La posesión es tal, que, no puede hacer memoria de los actos realizados luego de haberlos hecho. El diablo ha tomado a esta persona en sus tres dimensiones; alma, cuerpo, y espíritu. Puesto que, al entrar el demonio lo hace a través de su mente y luego la obstruye, entonces, toma dominio de su cuerpo y finalmente apaga su espíritu. Pero Dios que es justo, puede darle el momento de lucidez y oportunidad. -Si un caso así llega a manifestarse, se debe completar igualmente cada uno de los primeros 4 pasos que a continuación detallaremos. El poseído tiene actitudes antisociales y violentas. No se ve ni escucha lo que usted le puede hablar. Pero solamente la misericordia de Dios puede liberarlo; ejemplo: Marcos 5:1-20. ¿Qué hacer frente a una manifestación? debemos de asegurarnos del nivel de voluntad que tiene la persona que necesita liberación. La manifestación demoniaca no es señal de que ha perdido su conciencia y voluntad sobre ella misma. Por lo tanto, debemos determinar qué grado de manifestación tiene la persona que necesita liberación. Existen dos situaciones que pueden surgir frente a una liberación. Primera opción. Es una persona que se acerca Dios, ya sea en la iglesia o en una oración, y comienza a experimentar sensaciones intensas de opresión tanto de su pecho, como de su garganta. Luego dice, que en ciertas áreas de su vida necesitan ser libre. En ese caso debemos comprender que la persona está totalmente consciente y necesitamos mucho cuidado durante la oración con las palabras que decimos para que la persona sea libre y no sienta temor. -Aquellos que nunca han tenido relación con el mundo espiritual como nosotros los cristianos, no comprenden las verdades acerca de las ataduras demoníacas. Nosotros somos los más indicados para explicarles con mucho cuidado y amor, como es la situación y ofrecerles la posibilidad de que sea libre de las ligaduras que las están atando. Segunda opción. Es aquella persona que ante una oración, comienza manifestarse demoníacamente. Nosotros debemos identificarle por medio de diversas señales que demuestra el que más adelante señalaremos. Esta persona debe ser llevada a un lugar aparte, fuera de la vista curiosa de la gente y allí identificar este primer punto para luego continuar con los siguientes. En este paso es sumamente necesario discernir por medio del Espíritu Santo, el grado de conciencia que tiene la persona manifestada. El primer contacto que ella tiene contigo, tenemos que ver que está muy asustada por lo que le está pasando en su interior. Una fuerza está manejando su cuerpo de tal forma que no puede controlar. Por eso, debe de tener mucho cuidado en la manera de tratar a esta persona, debemos ayudar la, ella no debe sentirse agredida sino atendida con mucho amor. Pues los siervos de Dios lo que queremos para esa vida es que sea libre de las manos de Satanás, esto es lo que nos debe mover y sentir en el corazón si no actuamos así, lo único que lograremos, será que sienta pánico, como resultado la estaremos ligando el temor, el lugar de liberarla. Dentro de este tipo de manifestación encontremos a: • personas que no recuerda nada, quedan bloqueadas, confusas, y espíritu inmundo se manifiesta, ellas no forman parte de éste primer proceso de manifestación, hasta que luego la ayudamos a tomar el control de sí misma para que sea quien tome decisiones. Cuando vuelven así preguntan: ¿dónde estoy? ¿Qué me ha pasado? Etc. etc. • otras están totalmente conscientes pero el espíritu inmundo que domina su voluntad no le permite que ella actúe sobre sí misma en este paso, aunque parece sencillo, es muy importante y necesario que antes de atar al espíritu inmundo, nos aseguremos del grado de manifestación que tiene la persona. Deberemos ser muy prudentes en el trato con estas personas. - No debemos administrar equivocadamente, no debemos pretender al demonio porque en la mayoría de los casos las personas que debe ser administradas están totalmente conscientes mortificadas con el trato... "humilladas" con el trato autoritario que se les da. Alguno de las señales que debemos tomar en cuenta con respecto a la manifestación demoniaca son: • pérdida de control de sus movimientos. • Rostro desfigurado. • Movimientos bruscos. • Mirada hostil. (Les es difícil abrir los ojos) • mirada vidriosa. • Opresión del techo u otras partes del cuerpo. • Bloque y risa nerviosa y sarcástica. Muchas veces estas señales no están directamente relacionadas con el grado de conciencia que tiene la persona. Debemos de depender continuamente de la sabiduría del Espíritu Santo para no cometer errores. ¿Qué no hacer? En cualquier manifestación física no es aconsejable comenzar a reprender y a expulsar demonios. En caso de que la persona esté consciente puede producirse un shock emotivo importante. Porque el problema que está viviendo se le suma el miedo que le produce nuestro proceder. En lugar de liberar a esta persona de las ataduras, la estamos ligando aun más induciéndole temor. 2. PASO. Si la persona está manifestada, tomar la autoridad en el NOMBRE de JESUS y sujetar el espíritu inmundo. ¿Cuáles son las palabras de sujeción? Una vez que la persona que se manifestó se encuentra en un lugar seguro y apartado, y se determinó el grado de manifestación que tiene, entonces ha tomado autoridad sobre los espíritus demoníacos y los a sujetado en el NOBRE de JESUS. –Creo conveniente–, como resultado del estudio de la Palabra, que la frase más adecuada para tratar con los espíritus es: "Sujétate en el NOMBRE de JESUS". El concepto de sujetarlo es el más adecuado, pero aun sabiéndolo… no decimos esas palabras, sino: "Demonio te ato" o "Sujétate Diablo inmundo". Debemos de tener en claro que si la persona está totalmente bloqueada no entiende lo que estamos pronunciando, por lo tanto, podemos decir: "Demonio" o "Satanás" y ella… no comprende. Pero si está consciente y comprende lo que estamos diciendo, se asusta. Por lo tanto, aconsejo decir: "¡Sujétate en el NOMBRE de JESUS!" ¡NO REPRENDA AL DEMONIO! La orden de sujetarse en el nombre de Jesús, resulta Mucho más efectiva que cualquier otra expresión referente a la autoridad sobre los demonios. Esta declaración no incluye solamente el área espiritual sino también todas las otras de la persona. Cuando Jesús envió a los setenta a predicar, al regresar le contaron con mucho gozo su experiencia diciéndole: "Señor, aun los demonios se nos sujetan en tu nombre" LC. 10:17. Es necesario sujetar al demonio antes de administrar a la persona. Una vez dada la orden, debe creer que la persona ya está bajo la autoridad de Jesús. Cuando utilizamos esta expresión, si la persona está consciente puede creerse que le estamos diciéndole a ella que se quede "quieta". Evitando que se lastime físicamente, ni va a ofender, si decimos: "demonio te ato"… probablemente se asustará. ¿Por qué necesitamos que el Demonio se sujete? Al estar el demonio sujeto, sabemos que se encuentra bajo la autoridad de Jesús. El espíritu inmundo no está sujeto va a pretender continuar haciendo lo que quiera con la persona mediante las manifestaciones violentas. Pero si administrar usamos la autoridad que Jesús nos ha concedido, el demonio tiene que responder a nuestras palabras y quedar sujeto. ¿Cuántas personas debe sujetado o atar a los demonios? (Una sola persona). Dentro del grupo que está administrando debe de ser la que tome autoridad frente al demonio. El resto de debe apoyar en oración artista sujetando "administrando" con todos incluyendo el pastor administran... ¡todos a la vez gritando y reprendiendo! Parece que el que más grita es el que más autoridad tiene… y no es así. La autoridad no es propia sino que es conferida, no administrando el nombre sin el nombre de Jesús. En la administración de liberación debe de haber mucho orden. Si por causas del cansancio o por motivo, quien está ministrando no puede seguir, invita a alguno del equipo a que contiene delegando autoridad, y que siga el. En la Biblia no está escrito que alborotemos a los demonios, sino que se sujeten ante el nombre de Jesús. Por lo tanto, aprendemos a sujetarlos. Si no actuamos cómo corresponde, el demonio seguirá manifestándose. En algunos casos el demonio se pude expresar así: "Poneros de acuerdo primero y después me iré". ¿Cómo evitar que la persona manifestada se haga daño físicamente? Una vez que la persona en cuanto a autoridad logra sujetar al demonio, debe decirle también que en el nombre de Jesús le prohíbe hacerle daño. A menudo los demonios, cuando se les ordena soltar a quienes han tomado, tratan de perjudicar a la persona con diversas molestias físicas: ahogos, presiones, palpitaciones, etc., ect. Cuando administramos el Espíritu Santo se revela. El nos indica que hay un problema. Debemos darle lugar al Espíritu Santo para que obre libremente. No hay demonio que desobedezca cuando ordenamos sujetarse en el NOMBRE de JESUS. Tal vez, algunos dan más trabajo que otros, ya que unos son simples soldados, y otros tienen rangos mayores e intentan oponerse. Esto suele ocurrir cuando la persona tiene un gran odio en su interior, estos son casos muy difíciles, el odio se manifiesta con violencia, con venganza por esto, en esta manifestación se mezcla lo espiritual y lo físico. A través de reacciones violentas. 2. PASO. Hacer volver en sí a la persona. Una vez que atravesamos los pasos anteriores, el demonio está sujeto y la persona tranquila. Entonces debemos invitarla a que despierte o tome dominio y control de su propio cuerpo. Siempre que El Señor trata a alguien, lo va a hacer cuando la persona esté en plena consciencia. Es muy diferente con el diablo, quien toma la voluntad de la persona y hace con ella lo que quiere. Ayudar a la persona a tomare dominio de su cuerpo y de su mente. Cuando una persona se manifiesta sabemos que tiene problemas. Por lo tanto, tenemos que administrarla para ayudarla. Pero, ¿Cómo ayudar espiritualmente a una persona que está inocente? Debe tener su voluntad dispuesta para tomar decisiones y así renunciar y ser libre. Esto lo logra solamente cuando los demonios son atados y no pueden influenciar esa vida. Las palabras que decirle a la persona a modo de ejemplificarlo, pueden ser la siguientes: (Llamarla por su nombre: Pedro, Luís. Etc.) Y decidle: "En el NOMBRE de JESUS", (toma dominio y control de tu cuerpo y de tu mente. Vuelve ahora. Abre tus ojos). Si no conoce el nombre de la persona es aconsejable decir: "Espíritu humano, en el NOMBRE de JESUS. Toma control, y dominio de tu cuerpo, de tu mente, abre tu ojos y vuelve ahora". Estas palabras, por supuesto, deben de ser utilizadas en caso de que la persona no esté en total grado de consciencia. Si la persona se encuentra consciente, tiene los ojos abiertos y ve todo lo que está pasando, no es necesario llamarla de esta forma. Simplemente se le puede decir: "Bueno, ahora vamos a hablar un poco de algunas cosas". Es sumamente importante que esté consciente para que pueda hablar y tomar sus propias decisiones. Dios le dio al hombre libertad y responsabilidad para esto, aceptando o no los mandamientos. GN. Cap. 2-3. Una persona que está bajo la autoridad de un espíritu maligno no es consciente de lo que hace y no tiene validez lo que pueda hablar. No interesa hablar con la persona. No queremos establecer una lucha fuera de lugar con os demonios, sin ningún tipo de reparos. –Lo que buscamos son las causas dentro de la persona–. No se asuste si un espíritu maligno le dice: "no tienes autoridad" en el momento en que estamos tratando de que la persona vuelva en sí. Cuando nos habla un demonio así, debemos contestarle: "¡Ahora te sujetas, y después lo veremos si tengo autoridad o no!". Primero tratamos con la persona aun que el demonio esté hablando. Ayudamos a la persona diciéndole: "No tremas Jesús te mama y Él te va a ayudar, solo tienes que clamar a Él". Si el demonio sigue hablando mándelo a callar, y mostros seguimos hablando con la persona explicándole, qué; "Hay autoridad y poder en Cristo". Cuando la persona clama dice: "¡Dios mío; ayúdame!". Aun que con el pensamiento, la fortaleza de Dios viene. Cuando la persona repite el Nombre de Jesús la persona se desbloquea mentalmente "Jesús tiene un nombre, que es sobre todo nombre". Explique lo sucedido a la persona. Cuando la persona abre los ojos, le explicamos lo sucedido: "Tienes un problema espiritual y queremos Ayudarte", no debemos alarmar a la persona; diciéndole: "Estás endemoniada". Nunca debemos olvidar que estamos tratando con una vida y no debemos ponerle más cargas de las que ya tiene. Debemos quitar el peso que lleva sobre sus espaldas no aumentarlo y agravarlo. Dios nos respeta a nosotros, debemos de respetar a las personas que estamos ministrando. -Guiándonos por lo síntomas de la persona si solo reprendemos, es un error, debemos primero buscar la colaboración de la persona afectada para alabar con quien produce los síntomas. Para entenderlo mejor: Si tenemos una araña en casa por mucho que limpiemos las telarañas, siempre aparecerán de nuevo, si matamos a la araña se acabó las telarañas… es la persona misma quien tiene que renunciar conscientemente a todas sus ataduras, poniéndose bajo la autoridad de Jesús. Si no está en sus cabales no podemos intentar romper los yugos que la atan, porqué no lo querrá hacer, menos aún, si está manifestada. Cuando estemos ministrando, y haciendo volver en sí a la persona y la guiamos en el renunciamiento, a veces el demonio en ese momento le bloquea la mente, la lengua, y se vuelve a manifestar. En este caso, debemos de comenzar nuevamente desde el segundo paso, (sujetar al espíritu maligno), que vuelva en sí nuevamente para luego continuar en el renunciamiento. 3. PASO. Preguntarle a la persona si quiere ser libre. Preguntamos: "¿quieres ser libre?". Aunque la pregunta sea muy obvia, no siempre las personas desean recibir liberación. Depende de la voluntad de la persona. No podemos romper la autoridad sobre sí misma. Ninguna liberación es posible si la persona consciente no dice: "Si quiero ser libre". Cuando alguien quiere ser libre y deshacerse de cosas que tienen que ver con el Diablo, lo primero que tiene que hacer es conocer a Cristo. -El poder de Dios no se desata sobre una vida si ella no está dispuesta a someterse a Él. Por lo tanto, la pregunta que debemos de hacerle a la persona una vez que tomó el control de su cuerpo y de su mente es: "¿Quieres ser libre?", "¿Quieres que te ministremos?". Si la respuesta es negativa. Conviene que oremos por ella y luego la dejemos ir. Debemos respetar su decisión y recordar que todos tenemos libre albedrío y debemos aceptar su decisión. No podemos obligar a nadie a que sea libre. Las decisiones, en lo específicamente referido a lo espiritual, son propias dado que: "cada uno de nosotros dará a Dios cuentas de sí"; RO. 14:12. Dios nos trata en forma personal. Si la respuesta es afirmativa. Debemos comenzar a ministrarla. Con mucha prudencia hay que explicarle lo que ha pasado cuando se ha manifestado y asegurarle que necesita ser libre (Liberada). Debemos enfrentar a la persona con la realidad que está viviendo. Una vez que ella está consciente debe ella decidir por su liberación, de ahí en adelante comienza la liberación espiritual. 4. PASO. Presentarle el plan de Salvación e invitarlo a aceptar a Cristo. Sin Cristo no hay Salvación ni liberación, para que sea libre es imprescindible la presencia de Cristo en la vida de la persona. La persona tiene que comprender que tiene ataduras espirituales y que está bajo el dominio del Diablo porqué: "Todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado", JN. 8:34. -Solo es posible liberarnos del dominio del Diablo cuando nos rompeos bajo la autoridad de Cristo. JN. 8:36. "Así, qué si el Hijo del hombre os libertare, seréis verdaderamente libres". Nadie puede ser libre del yugo e Satanás si no acepta a Cristo como Señor y salvador, no se puede echar el demonio de una vida si primero no se da lugar a Cristo. Es imposible ministrar liberación si la persona no acepta el señorío de Cristo para su vida. Podemos reprenderle y echar demonios pero la liberación no será efectiva y duradera, pues la persona no está protegida por la presencia del Señor."El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del omnipotente". SAL. 91:1. Si tenemos al Señor, el enemigo no puede ni podrá hacernos daño. Pero es pertinente que Dios ejerza autoridad sobre todas las áreas de la vida. No puede haber liberación de algo que no se ha entregado. Es importante recalcar que la Palabra de Dios enseña que no tenemos autoridad sobre una vida para obligarla a aceptar a Cristo. Nadie aceptó a Cristo por obligación sino voluntariamente. No se puede expulsar primero los demonios de las vidas para que luego entre Cristo… pensando que primero hay que limpiar la casa para que entre Cristo. Nadie puede luchar contra un reino si antes decide no pertenecer más a él. Si quiere ser libre de las tinieblas tiene que acercarse a la luz. La autoridad máxima es el Señor y bajo esa autoridad debe querer la persona estar. Por lo tanto, lo más positivo del proceso de liberación es que la persona se decida por Cristo. "Quiero ser libre pero…", Quien decidió ser libre, pero se resiste a abandonar tal o cuál práctica de su religión, no se puede recibir liberación. La Palabra de Dios asegura que sin el Hijo de Dios no hay libertad total. Se nos puede presentar 2 cosas diferentes: 1. Aquellos que nunca conocieron al Señor. 2. Los que conocieron al Señor, pero se han apartado de Él y viven en pecado, aunque vallan de vez en cuando al culto, pero no viven consagrados al Señor bajo su Señorío. Hay circunstancias que impiden el desarrollo del cristiano. No pueden vivir totalmente entregadas al Señor porqué existe áreas de sus vidas que no están plenamente dominadas por el Espíritu Santo. En todos los casos no debemos juzgar sino ayudar a quienes el Señor nos da el privilegio de ministrar. 5. PASO. Indagar qué áreas de la vida han quedado atadas como consecuencia del pecado. Luego de aceptar a Cristo en su vida y su corazón, la persona debe de disponerse a quitar todo aquello que impide que la Obra del Espíritu Santo sea total. Por lo tanto, comenzamos a indagar sobre las áreas de su vida en las que puede haber ataduras. Cuando hablamos de ataduras nos referimos a consecuencias del pecado. Desobedecer a Dios trae consecuencias que va más allá de lo que podemos imaginar en las áreas del cuerpo, del alma y del área espiritual. Para poder conocer las ataduras que causan tales consecuencias. La indagación debe ser tipo pastoral animando a la persona a que abra su corazón en todos los órdenes. Asegurarse que no somos jueces sino ministros que deseamos ayudarla. La persona debe comprender que aun lo más sucio y horroroso que pueda contarnos no cambiará el concepto que tenemos de ella. De una forma u otra todos hemos dejado una parte oscura de nuestras vidas, de la cual el Señor se ha encargado. Estamos seguros que cuando llegamos a Dios, le confesemos nuestros pecados, Él perdonó y nos dio una nueva vida. Por eso, nuestra indagación no debe ser tipo policial, diciéndole por ejemplo: "Bien, ahora confianza lo que has hecho…". Amamos a la persona, no la juzgamos. La persona debe estar convencida de que nuestro interés no está en conocer aspectos de su vida para después cuestionar su conducta, sino que deseamos que ella exprese las cosas ocultas de su corazón para que pueda disfrutar la plenitud de Cristo. Si la persona se siente comprendida, no permanecerá nada oculto en ella, declarará todo lo escondido, y aun lo más profundo de su corazón si la persona guarda algo, la liberación no será completa. Delante del Señor no podemos tener cuartillos cerrados. Cuando estamos en su presencia y le pedimos que nos limpie, no puede haber ninguna área oculta. Si existe un sincero deseo de presentar todo delante del señor, el espíritu santo actuará logrando que la persona recuerde lo que parecía olvidado. El Señor mira mucho la disposición del corazón. La liberación es la consecuencia de un corazón dispuesto. Cuando las puertas de ingreso a la vida son cerradas para el Diablo, la persona queda totalmente liberada. Debemos ministrar bajo la dependencia del Espíritu Santo para ayudar a cerrar de forma definitiva todas esas puertas. Cuanto más cómoda se sienta la persona que va ha ser ministrada, tanto mejor. Por eso, es recomendable, que en lo posible estar en un sitio fuera de curiosos, o con mucha gente. Área del cuerpo. Relaciones ilícitas, las ataduras más comunes en esta área tiene que ver con relaciones fuera del matrimonio. Todo contacto sexual une a una sola carne a quien participa de él. "¿O no sabéis que e que se une con una ramera, es un cuerpo con ellas?" 1. CO. 6:16. Por lo tanto, al ser una sola carne se puede ser receptor tanto de enfermedades físicas como de problemas espirituales de la otra persona que participó en la relación. Entre esas vinculaciones encontramos: (Ataduras, pactos, incorporaciones, etc.,) Si la persona con la que se unió sexualmente practicaba brujería, hechicería, o era espiritista, al ser una sola carne con ella, los demonios que tenía autoridad sobre esa vida pueden ejercerla también sobre la otra. El pecado de fornicación y adulterio ha sido perdonado por Cristo, si se lo acepto como Salvador. Pero lo que no se han roto son las consecuencias del pecado. Más los que han tenido relaciones sexuales ilícitas deben específicamente a todos los que compartió su cuerpo, a todos con los que se unió formando una sola carne, si esa unidad no se ha cortado, renunciando específicamente (adj. Que distingue una especie o una clase de elementos de otra) y en el NOMBRE DE JESÚS, la otra persona puede hacerse daño acarreándole problemas espirituales. Por esa razón, es necesario desligar a la persona de la atadura sexual, y en consecuencia espiritual, a la que se halla sometido al llegar a ser uno con la otra persona, ya sea del mismo sexo o no. Área del Alma. Esta área tiene que ver con los sentimientos y con la voluntad. Aquí las ataduras provienen de odios y de miedos. El Odio. El odio constituye uno de los espíritus más resistentes. Da lugar a rencores, enojos, resentimientos, envidias, orgullo, violencia, deseos de venganza, maledicencias, etc. Produce: raíces de amargura, falta de perdón, depresión nerviosa, "quien no perdona no perdona no puede ser perdonado." MT. 6:14-15. "14 Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; 15 mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas." Si el odio fue causado por el menosprecio de alguien la persona debe recordar exactamente la circunstancia para quedarse libre. También debe recordarse de la persona que causó ese dolor y clamar: "En el NOMBRE de JESUS… perdono a: (nombre de la persona" Por haberme… y por (hablar del menosprecio) Al romper la causa del verdadero problema se acabarán las consecuencias. Y será libre de esta terrible atadura. El Temor. El miedo ocasiona a las que comúnmente denominan "Traumas", figuraciones, complejos y muchas veces, temores, dudas, inseguridades, fobias, etc. es decir, poder imaginar lo que una persona puede sufrir a través de los miedos, profundos. A causa del temor puede llegar a someterse bajo autoridades espirituales de maldad. Por eso, no solamente es necesario renunciar al temor, sino que hay que recordar específicamente la causa que lo provocó y entonces mencionándola renunciar orando y proclamando. Muchos padres atan a sus hijos diciéndoles: "siempre tendrás que estar conmigo, porque todo lo que tengo es para ti, para que estés bien y no te falte nada". O le decimos todos los días: "ten cuidado no tengas un accidente, etc." Con nuestras palabras estamos abriendo puertas al enemigo, creamos temores sobre esa vida. La palabra debe ser: "Ve con mi bendición y con la confianza de que Dios está contigo". La prudencia es la que tenemos que trasmitir, no el miedo. Puedo decirle a mi hijo que tenga cuidado y no corra con el coche porque no es bueno, pero si le decimos te puede pasar esto u lo otro creamos un entorno de temor muy grande. Si formamos a nuestros hijos con tantos temores, cuando se enfrenten a la vida tendrán miedo de tomar decisiones, estarán siempre inseguras con los problemas de carácter que se da cuando se es un niño inseguro. De mayor tendrá muchísimos problemas y sufrirá mucho. Prohibido tener miedo. El miedo es una puerta a los demonios. Satanás nos asusta para que como resultado de ello, quedemos perturbados por determinado temor, y para que el pueda entrar en nuestra vida sin ningún tipo de inconvenientes hay que indagar sobre los miedos que las personas pueden haber tenido. Por ejemplo; miedos de la infancia que se refleja en la vida madura miedos a la oscuridad, al agua, a las tormentas, a estar encerrados o a otras situaciones. Es necesario averiguar dónde nace ese miedo que constituye una atadura para esa vida. El cristiano que está sometido a Dios, no teme, cuando permanece en su voluntad somos inmunes a los temores. Sometidos a Dios tenemos autoridad para plantarnos delante del enemigo y decirle: "¡En el nombre de Jesús, vete!". Satanás no puede tomar a nadie que esté sujeto a Dios y que le obedece en todo. Falta de perdón. Hay problemas emocionales que son muy evidentes y que son producto del miedo. Un impacto emocional muy grande deja consecuencias imprevisibles e irresistibles. Cuando no se perdona no se olvida… esto nos hace desconfiados, solitarios, tremenda puerta abierta para el enemigo. Indagando se puede cerrar a través del perdón. Área espiritual. Al referirnos a ésta área, NO estamos hablando del espíritu, sino de todo lo concerniente al mundo espiritual de las tinieblas. Contacto con lo oculto por ignorancia. Curanderos, brujos, todo contacto con el ocultismo produce ataduras muy serias en el área espiritual, Dios no ha permitido no ha permitido a ser humano alguno entrar en las cosas secretas. "Las cosas secretas pertenecen a Jehová nuestro Dios, más las reveladas son para nosotros y para nuestros hijos para siempre para que cumplamos todas las palabras de la ley". DT.29:29. El que ingresa a estas cosas ocultas lo hace por otra puerta, comprometiéndose con el Diablo. Desde la aparente inocencia de consultar con horóscopos, la lectura de manos, tiras las cartas, hasta la más fuerte magia negra, todo pertenece al ocultismo. Es decir, nos está prohibido ingresar al mundo espiritual de las tinieblas. DT. 18:9-19. Toda consulta, ya sea a través de un horóscopo o cualquier otro método de intentar ver el futuro, lleva a una dependencia de quien consulta hacia la persona que es consultada. El que predice por medio de la adivinación; Por lo tanto, como ya sabemos es un sacerdote o ministro del Diablo. El mismo Satanás se disfraza de ángel de luz. De modo que todo aquel que se ha sometido a consejo de un sacerdote del Diablo se ha sujetado en autoridad a un espíritu inmundo que opera bajo las órdenes de su príncipe, sea cual fuere el compromiso o pacto que haya hecho. Si hizo pacto, de otra manera éste permanecerá. 6. PASO. Renunciar a las ataduras que se van encontrando y que manifiestan ser la causa de la opresión. Cuando ya se sientes las causas que originaron la atadura espiritual, invitamos a la persona a que repita una oración de renuncia sobre cada una de las situaciones específicas encontradas hasta ese momento. Esta oración debe de hacerse en voz alta, no gritando, pero audible igual que se hizo cuando fueron atadas con el enemigo. Renuncia a cada atadura significa desandar los pasos que llevaron a la persona a sellar compromisos con el enemigo, ya sea en lo físico, en lo emocional o en el área espiritual. No sirve la ruptura de una atadura sin especificar la situación diciendo por ejemplo: "¡Renuncio al curanderismo!", es como disparar un tiro al aire sin apuntar a ningún blanco en concreto. Tenemos que colaborar para que la persona renuncie a todo en la forma que cada cosa fue hecha. No es necesario, en el caso de las prácticas ocultistas que conozcas todas las costumbres ocultistas, si estamos ministrando a una persona que ha abierto su corazón porque el Espíritu Santo está obrando en ella, sacará todas las cosas que la atan. A medida que vamos tomando experiencia en la ministración, y la a través de lo que se escucha confesar, se conoce bastante acerca del ocultismo . Pero no es indispensable estar familiarizado con estos temas para poder ministrar. El Espíritu Santo no guía a indagar con mucho amor, prudencia y respeto cada área. No hace falta que nosotros comencemos a puntualizar cada detalle de esas prácticas intentando de esa forma ayudar a la persona a que recuerde, ella misma sacará afuera todo aquello que le oprime. La oración de renuncia debe de ser hecha con voz audible y entendible porque los demonios no son omniscientes (no lo saben todo) no tiene capacidad de leer la mente. Ellos pueden introducir pensamientos; ¡pero no saben lo que pensamos! El único que conoce nuestros pensamientos y pesa nuestros corazones… es Dios. Por eso, los demonios deben escuchar la renuncia que confiesan u rechazan. Es aconsejable que las renuncias que las renuncias audibles y claras sean también concretas, ejemplo: "Una atadura del Alma por tener odio" Podríamos orar así… "En el NOMBRE de JESUS renuncio a todo odio que le tengo a… le perdono por… y lo bendigo en el NOMBRE de JESUS". Así confesando y renunciando… perdonando específicamente con todos los detalles se libera totalmente, no dejando ningún terreno sin limpieza espiritual, de esta manera con todas las circunstancias que salgan. 7. PASO. Tomar autoridad en el nombre de Jesús, romper específicamente toda atadura, y al final echar fuera todos los demonios. Este paso se da en combinación muy estrecha con el paso anterior. Este se divide en dos partes: primero es la ruptura y luego la libración, se rompe el yugo, y luego se echa fuera los demonios. A medida que la persona recuerda las ataduras y renuncia a ellas, nosotros como ministros del evangelio, las debemos ir rompiendo inmediatamente. El renunciamiento y ruptura van juntos. Hay que deshacer las causas, todo lo que ha dado autoridad a los demonios para sujetar y someter a esta persona a medida que la persona renuncia rompemos ataduras. Si después de tomar autoridad en el nombre de Jesús, de romper concretamente toda atadura y echar fuera a los espíritus inmundos, la persona no queda libre, es porque seguramente existe algo más que aún no ha renunciado. No pensemos que el que administra le falta autoridad. Lo que está faltando es claridad acerca de la causas por las cuales las personas es oprimida o está atada. Por eso, es recomendable, primero romper con autoridad… todo yugo, atadura por atadura y cuando creemos que ya no queda nada más, entonces echar fuera al demonio, quienes se manifiesten, a pesar de ser ministrados no quedan libres es porque tienen algo que ver con algo… en concreto que no ha sido contestado y renunciado, la atadura mal que descubrirla con su causa. Repito… hay que ministrar con mucho amor, paciencia, con sujeción al Espíritu Santo que nos enseñe… Liberación no es tener a la persona manifestada constantemente, denigrándola, golpeándola, o golpeándose ella misma, revolcándose o saltando… Así lo único que hacemos es colaborar con la demostración del poder maligno. 8. PASO. Invitar a la persona a que dé gracias a Dios por su liberación que declare que solo a Dios le pertenece la Gloria, la Honra y el Poder. Aunque este punto parece tener una importancia secundaria, es necesario recordar que solo a Dios le pertenece la Gloria, la Honra y el Poder. Una persona ha sido liberada ha de estar dispuesta a engrandecer a su libertador por la obra que fue hecha por la Gracia de Dios para con nosotros en Cristo Jesús, Señor nuestro. Junto a quién la ministró, la persona tiene que dar gracias a Dios por la liberación que disfruta a partir de ese momento. 9. PASO. Hacer orar a la persona para que sea llena del Espirita santo. No debemos orar nosotros para ungirla sino guiarla a que ella misma sea quien ore. "Señor, te doy gracias porque me has liberado". Recibo ahora la unción. La llenura del Poder y la Gracia del Espíritu santo. Jesús aconsejó que una casa que ha sido limpiada y ordenada no deba quedar vacía. MT. 12:43-45. Este último paso de exaltación y adoración de la persona liberada (Que le adore y le exalte varias veces repetidas)… constituya una confirmación de que ha sido liberada totalmente. Si se manifiesta al adorar y ensalzar el nombre del Señor, es qué, no está liberada del todo. Hay que sujetar al espíritu inmundo y empezar a indagar de nuevo. Cuando la persona ha sido liberada debe de tener un seguimiento espiritual por el Pastor y los hermanos, sea prudente y sabio nunca jamás divulguemos las intimidades y experiencias que han afectado a una vida especialmente en la iglesia, incluye a otros hermanos, familiares o amigos. Y el Señor bendecirá tu fidelidad y te seguirá usando, de no ser prudente y proclamador Dios no nos usará en este ministerio. Escuela Bíblica de Filadelfia en Alicante. Con cariño para todos los alumnos de susodicha escuela, para que el conocimiento, el poder y el amor por las almas nos hagan cada día más sencillo, pero poderosos en el NOMBRE de JESUS. ATT. Profesores; Cacho y Mariano.

viernes, 11 de junio de 2010

POSESIÓN DEMÓNÍACA Y LIBERACIÓN.

POSESIÓN DEMONÍACA Y LIBERACIÓN. INT. Debemos de saber que el último peldaño es la posesión, cuando un alma, hablamos de las que no conocen a Dios, hacen pactos con el diablo, verbal, de sangre y físico, el conjunto de los tres se usa el rituales satanistas, de iniciación, ofreciendo a este ser despreciable, seres vírgenes, tanto varones como hembras, y más jóvenes mejor. -La captación de este, es por medio de la droga, pornografía, orgías, borracheras, pleitos, homicidios, cosas delictivas, que lleven al ser afectado a los pies de Satán, creyendo que en él, encontrarán soluciones sus problemas, la santería, woodo, candomblé, macumba, magia blanca etc., empieza por una influencia, opresión (depresión) y posesión, toma su cuerpo única finalidad del todo el proceso, ya que estos ángeles caídos, no tiene cuerpo y necesitan uno para operar en la esfera humana. ¿Cómo se percata uno de tal posesión?
-Cuando al querer anunciarle a Cristo… este manifiesta a quién pertenece. (A su dueño, el diablo). En casos de liberación, cuantos menos participen mejor, el demonio le gusta confundir a los que intervienen, si es solo uno, no ha porque (como defecto humano contender uno con otro por tal cosa) Y este lo sabe.
Jesús sana a un muchacho endemoniado (Mt. 17.14–21; Lc. 9.37–43) MR. 9:14-29. vv. 14: «14 Cuando llegó a donde estaban los discípulos, vio una gran multitud alrededor de ellos, y escribas que disputaban con ellos
Es decir, antes de aparecer en escena Jesús, los discípulos y escribas disputaban… sobre el endemoniado, el texto, declara que un hombre trajo a la sinagoga a su hijo en estado de posesión. Vv. 15-16.comp. Con la hija de la mujer sirofenicia. MT.15:22;
«15 Y en seguida toda la gente, viéndole, se asombró, y corriendo a él, le saludaron. 16 El les preguntó: ¿Qué disputáis con ellos? » «22Y he aquí una mujer cananea que había salido de aquella región clamaba, diciéndole: ¡Señor, Hijo de David, ten misericordia de mí! Mi hija es gravemente atormentada por un demonio». -El les preguntó: « ¿De qué discutís con ellos?» Jesús enseñaba tal cosa. Veamos: -Uno de entre la gente le respondió, MR. 9: 17-18:
«17 Y respondiendo uno de la multitud, dijo: Maestro, traje a ti mi hijo, que tiene un espíritu mudo, 18 el cual, dondequiera que le toma, le sacude; y echa espumarajos, y cruje los dientes, y se va secando; y dije a tus discípulos que lo echasen fuera, y no pudieron
— Para poder ministrar a una persona debe de haber un dialogo primero, no gritos, no sacudidas, para eso ya está el diablo… preguntar, y la persona, confesar, diciendo que mal le aqueja, o como en este caso, el padre lo explica, hoy día no es lo mismo que antaño para Israel, los demonios era conocidos, pero convivían con ellos al no cumplir la ley, los ladrones, caso de Abel homicida, Acaz ladrón, el del manto babilónico, Saúl espíritu de tormento, Nabucodonosor (Licantropía) hombre lobo… y muchas más operaciones demoníacas, pero centrémonos en el NT. La incredulidad es el factor más usado por Satanás, la falta de creencia es falta de fe. Sin fe es imposible de agradar a Dios. Y la desobediencia a los cristianos, la cual puede dar pie al proceso de las fases posteriores. Veamos; v.19.
«19 Y respondiendo él, les dijo: ¡Oh generación incrédula! ¿Hasta cuándo he de estar con vosotros?».
El señor dijo que no pasara de esta generación sin que esto acontezca 1 generación para muchos es de 40 años , para otros es de 70 pero la biblia habla de que el hombre puede vivir hasta 120. Abuelo, Padre e Hijo. (Se estaba refiriendo a la suya, los tiempos de su ministerio, tiempo presente: ¿Hasta cuándo he de estar con vosotros?) Todo lo que los discípulos le vieron hacer narrado en la Biblia y lo que no se recoge seguro mucho más de que si recoge. Somos muy incrédulos, solo creemos en lo que vemos, de ahí el diablo sabiendo estas cosas, no porque sepa todo, sino por lo que declaramos con nuestros labios. (El no es omnisciente). -Y se lo trajeron. Apenas el espíritu vio a Jesús, agitó violentamente al muchacho y, cayendo en tierra, se revolcaba echando espumarajos. Entonces él preguntó a su padre: « ¿Cuánto tiempo hace que le viene sucediendo esto?» Le dijo: «Desde niño.» «Y muchas veces le ha arrojado al fuego y al agua para acabar con él; pero, si algo puedes, ayúdanos, compadécete de nosotros.» Jesús le dijo: « ¡Qué es eso de si puedes! ¡Todo es posible para quien creeAl instante, gritó el padre del muchacho: « ¡Creo, ayuda a mi poca fe!» -Vemos, que hasta no acepto a Cristo y su estado… mostrando su fe, es decir, que se debe de ministrar igual, no gritadle, pues puede que sea el espíritu el que esté operando y no escucha, se debe de hacer volver a la persona que y que esta, confiese, como en este caso, su estado, para nosotros es algo más complejo, pues no somos Jesucristo. -Así, qué, se debe de charlar primero, con el afectado, confesar su pecados, aceptar a Jesucristo como su único Salvador y proceder a renunciar a cada uno por separado si es menester, para después, dirigirse al espíritu, sin tratar de saber su nombre ya que eso Dios lo da… sino, simplemente se le hace saber que esta persona por su confesión ha pasado a las filas del Señor, que ya no le pertenece, se le ata a la palabra de Dios en el nombre de Jesús, a la verdad para que no pueda mentir, y a la obediencia del ministro, para que no pueda hacer nada contra la voluntad del ministrador… a la autoridad de Cristo y por sus méritos. -A partir de ahí, se le dice, al demonio que salga solo una vez, sin gritar, ni sacudir con las manos a la persona, otra cosa es, que se resista… entonces este se manifestará contorsionándose, revolviéndose y otras cosas, se reprende y se ata, ¡Sobre todo se le ordena al espíritu inmundo que no le haga daño a nuevo cristiano! Viendo Jesús que se agolpaba la gente, increpó al espíritu inmundo, diciéndole: «Espíritu sordo y mudo, yo te lo mando: sal de él y no entre más en él.» Y el espíritu salió dando gritos y agitándole con violencia. Vemos que no se trata de un espíritu de enfermedad, sino. de posesión la cual le imlepdía hablar, oír, es decir pedir ayuda, ta que cada vez que lo intentaba caía en el trance de combulsionar. El muchacho quedó como muerto, hasta el punto de que muchos decían que había muerto. Pero Jesús, tomándole de la mano, le levantó y él se puso en pie. Cuando Jesús entró en casa, le preguntaban en privado sus discípulos: « ¿Por qué nosotros no pudimos expulsarle?» Les dijo: «Esta clase con nada puede ser arrojada sino con la oración.» Tenemos que ver que no somos nosotros quienes liberamos sino Él, pues la autoridad del Hijo de Dios es la que hace el trabajo. Nosotros haremos las cosas solo en su nombre, además la oración es el único medio para lograr victoria, aparte de la ministración en su Nombre... (San Marcos 9, 16-29) -Pues curó a muchos, de suerte que cuantos padecían dolencias se le echaban encima para tocarle. Y los espíritus inmundos, al verle, se arrojaban a sus pies y gritaban: «Tú eres el Hijo de Dios.» Pero él les mandaba enérgicamente que no le descubrieran. Subió al monte y llamó a los que él quiso; y vinieron donde él. Instituyó Doce, para que estuvieran con él, y para enviarlos a predicar con poder de expulsar los demonios.
Podemos observar que hay un proceder en el hecho de su conducta, Él quería que los que iba a llamar supieran usar su nombre correctamente (San Marcos 3, 10-15). Durante mucho tiempo parecía que las posesiones demoníacas, los exorcismos e incluso los demonios eran un mero producto de trastornos mentales precisados de un remedio psiquiátrico. Sin embargo, los exorcismos/leberaciones, siguen siendo tan necesarios como lo eran en los tiempos de Jesucristo. Muchas iglesias son atacadas, o vienen personas a las que hay que ayudar. -Por ello es necesario destacar la necesidad del ministerio de liberación cuando uno o varios espíritus malignos entran a morar en alguna persona. Y con esto no quiero decir que no existan las enfermedades mentales. Existen, por supuesto, y de hecho, antes de realizar un exorcismo suele exigirse un examen psiquiátrico. No debemos caer en reduccionismos. Ni todos los males son producto de los demonios, ni todos son producto de enfermedades mentales.
-Lo que suele suceder en ocasiones es que algunos casos de posesión demoníaca pueden parecer enfermedades mentales. Esto suele darse con algunos sujetos que aparentemente sufren una esquizofrenia, pero que finalmente, tras el exorcismo, se desvela que su mal se debía a que estaban infestados por varios espíritus malignos, lo que les da ese característico comportamiento descoordinado e inconexo. Aunque a muchos pueda parecerles increíble, me consta que esto sucede en la realidad. De hecho, la mayor parte de los lectores de este texto habrán sido testigos de acciones dramáticas provocadas por los demonios que poseen a ciertas personas. A través de la televisión y la prensa es posible enterarse de ciertos casos especialmente espantosos que suceden sin que haya una razón aparente. Casos como asesinatos dentro de las familias. Hijos que matan a sus padres. Padres que asesinan a sus hijos. Hermanos que asesinan a sus hermanos, incluso dentro de las Iglesias, etc. En estos últimos casos, los demonios se complacen, además, en profanar sangrientamente un lugar santo como es la casa de Dios. Lo más característico de todo esto, es que, tras los asesinatos, el homicida dice no acordarse de nada, o que oía ciertas voces interiores que lo incitaban a asesinar, o que tenía ciertas visiones terribles de las que debía defenderse, etc. Existen también demonios de tristeza y suicidio, que incitan constantemente a las personas a las que poseen a atentar contra sus propias vidas. Estas personas suelen ser en su mayoría atea o indiferente religiosa, y por consiguiente presa fácil para los diablos. Unas oraciones, sí, unas pocas oraciones podrían acabar con toda esta devastación. Pero la incredulidad y el ateísmo, en estos casos, suele resultar mortal. PASTOR MARIANO.

domingo, 24 de enero de 2010

"Demonología y sus variantes aspectos; Por el Pastor Mariano": Diefrencias entre ángeles y demonios

"Demonología y sus variantes aspectos; Por el Pastor Mariano": Diefrencias entre ángeles y demonios

Diefrencias entre ángeles y demonios

Demonio. Los demonios son ángeles (ver este término) Los ángeles son espíritus puros, o sea, "Libre de toda materia" Inmateriales… ellos si tienen la condición de inmortales. Existen con el propósito de alabar a Dios y servirle como mensajeros, asimismo, esta es la cualidad de su servicio, servir de enlace con los hombres, no mediadores sino servidores, custodiadores, guardianes, etc., velando su Salvación de los que aceptaron a Dios. La mayoría de instituciones teológicas reconocen su existencia y trabajo. Ellos no precisan un crecimiento espiritual y un período de madurez para amar a Dios en su estado de humano/natural e Físico/espiritual, por lo tanto, es libres y en esa libertad aman a Dios sobre todas las cosas aun, con su libre albedrío para elegir. Los ángeles fueron creados perfectos, nosotros para irnos perfeccionando. A causa de esta perfección a ellos no se les da la oportunidad de equivocarse, de arrepentirse, ni de ser perdonados, solo hubo una oportunidad al principio de los tiempos, cuando Dios les puso una prueba moral, que un tercio de ellos no consiguieron pasar, de estos millones de millones, la cantidad de ángeles caídos es considerable. Los ángeles caídos que ayudan a Satanás en la oposición a Dios, que no fueron perdonados, ni lo serán. Los demonios son malignos; "17 Volvieron los setenta con gozo, diciendo: Señor, aun los demonios se nos sujetan en tu nombre. 18 Y les dijo: Yo veía a Satanás caer del cielo como un rayo." (LC. 10:17-18. Pero aunque sea príncipe de este siglo, tenemos defensa contra él, JN. 12:31; El Dios de paz tiene concebido su plan e irá ejecutándolo, en contra de este enemigo nuestro. RO. 16:20; son poderosos; "29(Porque mandaba al espíritu inmundo que saliese del hombre, pues hacía mucho tiempo que se había apoderado de él; y le ataban con cadenas y grillos, pero rompiendo las cadenas, era impelido por el demonio a los desiertos.) " (LC. 8:29. Y se hallan bajo el poder de Satanás, su príncipe; "24Mas los fariseos, al oírlo, decían: Este no echa fuera los demonios sino por Beelzebú, príncipe de los demonios 25Sabiendo Jesús los pensamientos de ellos, les dijo: Todo reino dividido contra sí mismo, es asolado, y toda ciudad o casa dividida contra sí misma, no permanecerá. 26Y si Satanás echa fuera a Satanás, contra sí mismo está dividido; ¿cómo, pues, permanecerá su reino? 27Y si yo echo fuera los demonios por Beelzebú, ¿por quién los echan vuestros hijos? Por tanto, ellos serán vuestros jueces. 28Pero si yo por el Espíritu de Dios echo fuera los demonios, ciertamente ha llegado a vosotros el reino de Dios. 29Porque ¿cómo puede alguno entrar en la casa del hombre fuerte, y saquear sus bienes, si primero no le ata? Y entonces podrá saquear su casa. 30El que no es conmigo, contra mí es; y el que conmigo no recoge, desparrama." (MT. 12:24-30. Ellos reconocieron a Cristo, "23 Pero había en la sinagoga de ellos un hombre con espíritu inmundo, que dio voces, 24diciendo: ¡Ah! ¿Qué tienes con nosotros, Jesús nazareno? ¿Has venido para destruirnos? Sé quién eres, el Santo de Dios."(MR. 1:23-24. Y pueden poseer a los no cristianos; "29 Y clamaron diciendo: ¿Qué tienes con nosotros, Jesús, Hijo de Dios? ¿Has venido acá para atormentarnos antes de tiempo?"(MT. 8:29. Al parecer, existe una jerarquía de fuerzas demoníacas; "12 Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes." (EF. 6:12). Pastor Mariano.